Al igual que a los cientos de estudiantes internacionales que hace unos días se vieron obligados a abandonar nuestras aulas, a todos los que formamos parte de la plantilla del Centro de Lenguas Modernas nos gustaría poder decir #YoMeQuedoEnElCLM. La realidad, por el contrario, nos obliga a escribiros desde el CLM virtual, el único posible en estos momentos, del escritorio remoto instalado en el ordenador de nuestras casas.
Nos resulta extraño estar viviendo con tanta normalidad una situación que la generación de la que formamos parte nunca hubiera siquiera imaginado fuera de una sala de cine. Nuestras ventanas bien podrían ser las pantallas en las que se proyecta una película de ciencia ficción. Ante nuestros ojos, las calles aparecerían totalmente desiertas de no ser por la presencia de las unidades militares y policiales encargadas de velar por el orden público y el confinamiento forzoso de los vecinos. Son, junto a los médicos y sanitarios, que se dejan la piel en los hospitales para salvar vidas y contener la expansión del maldito virus, y a otros abnegados profesionales, nuestros superhéroes de carne y hueso. A buen seguro, pronto devolverán nuestras calles y plazas a su estado natural, esos espacios de nuestra ciudad cuya armoniosa mezcla de bullicio y sensación de seguridad los convertían hasta hace escasos días en la envidia del mundo. Abrazaban a nuestros estudiantes con tal intensidad que los abducían hasta hacer de ellos granadinos de corazón.
Por eso, a los que trabajamos en el CLM se nos partió el alma viéndolos, ante su inminente partida, llorar amargamente en nuestro patio. Cuentan las crónicas que también Boabdil, el llamado Rey Chico del Reino Nazarí, derramó lágrimas de dolor por tener que dejar su querida Granada. Desde entonces, a lo largo de los siglos, han humedecido indistintamente las mejillas de personajes célebres y visitantes anónimos. Es el efecto que provoca la belleza de Granada y la hospitalidad de sus gentes. Nos gusta creer que, en el caso de nuestros estudiantes, también contribuye a ello lo que el Centro y todos los que formamos parte de él les damos día a día.
A diferencia de Boabdil, sabemos que nuestros alumnos sí volverán a ver Granada. Será la misma Granada de siempre: acogedora, cálida, vibrante, hospitalaria. Con su belleza intacta y ajena a cualquier mal sueño ya pasado, los invitará a perderse de nuevo por las recónditas calles del viejo Albayzín en busca del Mirador que regala la más bella puesta de sol; los dejará extasiados ante la imponente presencia de la Alhambra y Sierra Nevada; les enseñará que la utopía de hacer confluir en una misma jornada cumbres nevadas y cálidas playas se hace aquí añicos en tan solo hora y media; les dará a degustar nuestra cultura en pequeñas porciones, como las tapas de las que Granada es orgullosa capital; y les empujará a dar sentido a nuestro trabajo en el Centro de Lenguas Modernas con su ruidosa presencia y sus mil acentos.
Si la belleza de Granada se ha mostrado, a lo largo de los siglos, impasible ante los efectos de conquistas, guerras, catástrofes naturales y epidemias, la batalla que ahora libramos sí va a obrar una gran metamorfosis en el Centro de Lenguas Modernas. El recuerdo de las lágrimas de despedida de nuestros estudiantes nos hará mucho mejores. Transformarlas en amplias sonrisas es el firme propósito de los que formamos parte de su plantilla. Con este fin estamos trabajando desde el confinamiento de nuestras casas y escritorios remotos, ese CLM virtual que nos devolverá en poco tiempo a nuestro CLM más real.
Cuando ese momento soñado llegue, queremos estar preparados para ofreceros mejores programas y servicios adaptados a vuestras necesidades académicas, nuevas herramientas de aprendizaje y un trato personalizado que aúne, aún más si cabe, profesionalidad y cercanía; y no escatimaremos esfuerzos en la tarea de seguir haciendo de nuestro CLM mucho más que una escuela de español, un espacio integral de divulgación y enseñanza de la lengua y la cultura españolas que continúe brindando, en el entorno histórico y humano inigualable que representa la ciudad de Granada, una experiencia vital y académica única.
Os emplazamos a reencontrarnos cuando esta pesadilla se haya quedado tan solo en eso, en un mal sueño, para que vosotros, estudiantes de todos los rincones del mundo, sigáis viendo en el Centro de Lenguas Modernas y en la ciudad de Granada el destino ideal para vuestra inmersión en la lengua y la cultura españolas.
Mientras tanto, os mandamos mucho ánimo y fuerza para superar estos difíciles momentos. #NosVemosProntoEnGranada.
We, the CLM staff, like the hundreds of international students who were forced to leave our classrooms a few days ago, would like to be able to say #IAmStayingAtCLM. Reality, on the other hand, forces us to write to you from the virtual CLM, the only one possible at this time, from the remote desktop installed on our respective home computers.
We find it strange to be living as if normal, a situation that our generation could never have even imagined off the big screen. Our windows could well be the screens on which a science fiction film is being shown. Before our eyes, the streets appear totally deserted except for the presence of military and police units in charge of public order and the enforced confinement of the neighbors. They, along with the doctors and health workers who are breaking their backs in hospitals to save lives and contain the spread of this horrible virus, are our real-life superheroes. Undoubtedly, they will soon return our streets and squares to their normal way of life, those spaces in our city that just a few days ago were the envy of the world for their hustle and bustle and an intense feeling of safety. Their warm welcome to our students turned them into “Granadinos” at heart.
That’s why all of us who work at CLM were heartbroken to see them in floods of tears in our central patio. It is not the first time tears have been shed by those who are forced to leave this city. It happened to Boabdil, the so-called Rey Chico of the Nazrid Kingdom of Granada, and to many other known and unknown visitors since then. The beauty of Granada and the hospitality of its people produce this effect. We like to think that our students’ CLM experience also contributes to this.
Unlike Boabdil, our students WILL see Granada again! It will be the same Granada as always – welcoming, warming, vibrant, hospitable. With its untouched beauty, far from any bad dream, it will invite you to get lost again in the hidden streets of the old Albayzín in search of the Mirador with the most beautiful sunset in the world; it will leave you ecstatic before the imposing presence of the Alhambra and Sierra Nevada; It will teach you that the utopia of having snowy peaks and warm beaches to enjoy is just an hour and a half away; it will give you a taste of our culture in small portions, like the tapas of which Granada is the proud capital; and it will let them give meaning to our work at the Centro de Lenguas Modernas with its buzzing atmosphere and a thousand different accents.
If the beauty of Granada has shown itself over the centuries, to be impassive to the effects of conquests, wars, natural disasters and epidemics, the battle we are fighting now will indeed bring about a huge metamorphosis at the Centro de Lenguas Modernas. The memory of our students’ farewell tears will make us much better. Turning them into broad smiles is the firm purpose of our staff. To this end, we are working from the confines of our homes and remote desktops. We want to offer you you, prospective CLM students, the best programs and services, all adapted to your needs, new learning tools and a personalized and warm service that combines, even greater if possible, professionalism and closeness; and we will not spare any effort in the task of continuing to make our CLM much more than a Spanish language school, a comprehensive space for the dissemination and teaching of the Spanish language and culture.
Let’s meet again once this nightmare is over, just a bad dream, and continue working together so that you, students from all over the world, continue to see the Centro de Lenguas Modernas and the city of Granada as the ideal destination for immersion in the Spanish language and culture.
In the meantime, we send you much encouragement and strength to overcome these difficult times. #SeeYouSoonInGranada.
En el Centro de Lenguas Modernas os estaremos esperando para seguir formando parte de una experiencia académica y vital inigualable. Seguiremos contribuyendo a sembrar de semillas de granados, vuestros corazones 💕.
Ahora desde casa, os echamos de menos y os deseamos lo mejor.
Tod@s estáis en nuestra mente porque os hemos visto, os hemos tratado y nos habéis capturado. Ahora estáis en nuestros ordenadores pero no de una forma fría, como lo están las personas a las que nunca hemos tenido ocasión de tratar, sino dentro de nuestras cabezas y de nuestros corazones.
Habéis tenido la ocasión de «saborear» la esencia del CLM y esa semilla que os habéis llevado, germinará y hará que un día podáis volver a esta, vuestra casa.
Recibid un abrazo muy muy grande y dos besos en las mejillas como esos que se dan en España.
MUA, MUA
Nuestro centro no es el mismo sin la vida que le imprimen nuestros alumnos. Estamos deseando volver a recibiros y os estaremos esperando con los brazos abiertos para ofreceros la mejor de las experiencias en nuestro país, nuestra ciudad y nuestro centro.
Un abrazo enorme a todos nuestros alumnos (pasados, presentes y futuros).
Estimados y estimadas estudiantes: desearos lo mejor en estos momentos excepcionales, sobre todo y en primer lugar, mucha salud. Esta pandemia Dios mediante, pasará, y el Centro de Lenguas Modernas volverá a ver su patio y aulas llenos de la sangre que circula y da vida a su cuerpo como sois vosotros y vosotras estudiantes. Los que me conocéis como docente sabéis que mi canción favorita es «Granada» que, en el momento que la canto por primera vez, deja de ser «tierra soñada por mí» y se convierte en «tierra soñada por ti», ya, para toda tu vida. La última melodía que comparte protagonismo con la anterior en mis asignaturas es «Algo más», que casi siempre os pregunto cantando cuando comentamos alguna imagen en clase y queda alguna particularidad por compartir. Ese «algo más», pero fundamental que tiene «Granada», su Universidad, en la enseñanza de las diferentes culturas, en el aprendizaje de diversos idiomas, en la formación del profesorado que irradia el español por el mundo, entre otros objetivos prioritarios, es, sin lugar a dudas, el Centro de Lenguas Modernas. De ahí que todos los caminos o líneas convergentes, la del «Buen gusto» entre ellas, tienen su punto de fuga o «encuentro» en el CLM. Os esperamos. SALUDos
QUERIDOS estudiantes del CLM
Nunca antes os había sentido tan cerca estando tan lejos, en estos duros momentos.
Se acostumbra uno a una rutina donde las clases y las aulas forman parte de lo cotidiano, pero de repente sucede algo que trunca ese día a día y es entonces cuando LO HUMANO EMPIEZA A BRILLAR MÁS.
Estamos al otro lado de una pantalla pero os sentimos cerca con vuestras sonrisas,con vuestra atención y vuestra actitud receptiva. Os percibimos cada día muy próximos a nosotros, muy nuestros. Y esperamos con mucha ilusión vuestra vuelta a esta ciudad hermosa, que es más bella con vosotros por aquí.
Llegará la calma y aquí os recibiremos con las mismas ganas de mostraros nuestra lengua, nuestras costumbres, nuestra cultura y nuestra idiosincracia. Nos enriquecéis con vuestra presencia en las aulas, y ahora en las pantallas.
Somos una gran familia educativa. RESISTIREMOS esta crisis.
Os agradecemos SER CLM. Siempre formaréis parte de esta universidad. Es vuestra casa.
Mariángeles Martínez
Hasta hoy ,ya he vivido en Granada 7 meses , también he estudiado 7 meses, muchas gracias a la escuela y a los profesores por proporcionarme una plataforma para aprender español, recordando que acabo de llegar a España en septiembre del año pasado ,solo puedo entender el 10% de mi clase en el primer mes, es muy difícil escribir tareas cada vez. Después de 7 meses de estudio, mi español ha mejorado mucho. Ahora me he comunicado con hispanohablantes . Estoy muy contento con mi progreso ,también es la contratación del profesor.
Ahora todos están en casa , es muy bueno para protegerse. Espero que vuelva a la normalidad pronto , tengo muchas ganas de volver a la escuela.
Espero que todos estén sanos y seguros. Espero veros pronto.
Gracias de nuevo.
Aunque no podemons encontrarnos en vida ahora, no sencontramons en línea. Estos meses de estudiar en CLM,he aprendido mucho , he conocido muchos amigos y profesores . Ellos son muy buenos. Tambiém, la escuela es muy bueno y hermoso. ¡Espreo que todos personas están sanos! Esperamons verte la prócima vez¡
Este confinamiento ha sido mucho más ameno gracias a las clases de CLM, sin duda la profesora Verónica Carrero es excepcional, además de buena profesional tiene una gran empatía con sus alumnos, gracias por tus clases!!
Gracias Elisabet! Vosotros también habéis hecho mi confinamiento más ameno! Thanks😘😘😘😘
El CLM tiene una magnífica representación en Melilla con Verónica Carrero. Una profesora diez, con la que aprendes mucho pasando un rato agradable. Gran profesional y gran persona. ¡Así que gracias también al CLM en Melilla!