365 Días frente a la discriminación

¡Jóvenes, niñas, mujeres en general, de la presente sociedad! Si no queréis convertiros en prostitutas, en esclavas sin voluntad de pensar ni sentir, no os caséis.

(Francine Masiello, 1896)

Juana Manuela Gorriti Zuviría
Juana Manuela Gorriti Zuviría

Esta cita demuestra que la lucha contra la desigualdad de la mujer no es nada nuevo. Cuando se habla del feminismo, hablamos del siglo XX, de cómo la mujer salió a trabajar en el espacio público y luchar por su derecho a votar. En cambio, escritoras del siglo XIX nos enseñan que a lo largo de la historia ha habido voces fuertes luchando por los derechos de las mujeres. Juana Manuela Gorriti y Gertrudis Gómez de Avellaneda representaron estas voces y propusieron ideas que hoy en día todavía se pueden considerar modernas.

Avellaneda nació en Cuba en 1814. Con solo 22 años llega a España y empieza su carrera literaria. A través del ensayo “Capacidad de las mujeres para el gobierno”, Avellaneda exige la igualdad de la mujer en nombre de la universalidad de la razón, usando una idea principal de la ilustración para reforzar su propio argumento. Para Avellaneda, las mujeres merecen ser integradas en la sociedad tanto como los hombres. Escribió frases impactantes en varias revistas, comentando una revolución de la mujer en contra de las fuerzas que las oprimen e incluso desafiando las teorías políticas de Rousseau y Kant.

● “En los países en que la mujer está envilecida, no vive nada que sea grande: la servidumbre, la barbarie, la ruina moral es el destino inevitable a que se hallan condenados” (Avellaneda, La defensa de la mujer).
● “La escritora presenta la relación entre los sexos como un pacto de sumisión entre opresores y oprimidos, y denuncia la ilegitimidad del pacto social vigente por estar basado en la <<fuerza corporal>> que permite a los hombres someter a la otra mitad de la especie” (Albin 73).
● “La revolución moral que emancipe a la mujer debe ser forzosamente más lenta que la que sentó las ya indestructibles bases de la emancipación del pueblo; porque en este la mayoría era inmensa; la fuerza material irresistible: en aquella no hay mayoría, no hay fuerza material poderosa: todo tiene que esperarlo de los progresos de la ilustración, que haga conocer a sus propios opresores cuán pesadas y vergonzosas son para ellos mismos las cadenas de ignorancia y degradación que han impuesto a unos seres a quienes, a despecho de sus leyes, los ligan y sujetan íntima y eternamente las leyes supremas de la naturaleza […]” (Álbum de las damas).

Gertrudis Gómez de Avellaneda

Por otro lado, y aún centrándose en la misma lucha, Juana Manuela Gorriti estuvo rodeada por ambientes distintos. Gorriti, de Argentina, vivió durante una época de violencia y guerra en Sudamérica. En tanto que los hombres luchaban y se mataban unos a otros por la libertad del estado, ella luchaba con voz y pluma por la libertad e igualdad no sólo entre los sexos sino también entre las clases sociales.

“Ella es un elemento radical del verdadero progreso; y este es más sólido, positivo y permanente cuanto más se eduque e ilustre las condiciones intelectuales y morales de la mujer, a fin de que pueda desempeñar la grande obra del progreso humano”. Escribió Gorriti en Sobre la Mujer en 1877.

Estas dos autoras representan el movimiento hacia la igualdad de las mujeres y el desarrollo de sus derechos. Las dos mujeres logran proponer que el papel de las mujeres incluya educación y razón, algo que también había sido propuesto en las obras de Sor Juana Inés en el siglo XVII, quien se había manifestado en contra de la desigualdad e injusticia que sufren las mujeres. La consideración de las mujeres como ciudadanas iguales a los hombres cambia el entendimiento de la sociedad, enseñándonos que está formada de dos partes iguales. Estas escritoras nos recuerdan que olvidar educar a las mujeres es lo mismo que no educar a la mitad de la sociedad, algo que sería un gran error.

Sor Juana Inés de la Cruz

Aunque el Día de la Mujer sea indicación de progreso, es bueno también recordar que la lucha por la igualdad, que aún sigue, no se trata de solo un día, sino que debe ser mantenida a lo largo del año y de forma transversal en toda la sociedad. La literatura, y sobre todo los medios de comunicación que solemos consumir, deben siempre acordarse de proponer la educación y la buena formación de todas las partes que constituyen una sociedad, incluyendo grupos que, a lo largo del tiempo, han sido omitidos.

Estas escritoras nos recuerdan que esta lucha sigue con nuestras propias voces y que es nuestra decisión usarlas por el bien de la sociedad.

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Relatos y lecturas graduadas de ELE de la Editorial Edinumen

Mariángeles Lamolda
(Profesora de español para extranjeros, CLM)

En esta nueva edición de Booktubers del CLM os presentamos un libro de relatos y una colección de lecturas gradudadas de ELE de la Editorial Edinumen, Relatos 3, que podrás encontrar en la Biblioteca del CLM. La profesora del Centro, Mariángeles Lamolda, comparte sus impresiones como lectora y profesora ELE y recomienda su utilización en clase o como lecturas para los estudiantes fuera del aula.

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Cartel Concurso Microrrelatos

Ganadores del I Concurso de Microrrelatos de Navidad CLM

Primer premio

MI AMIGA MARIANA
(Ana Belén Sabio Bonilla)

“Noche de paz…”. Suena de fondo, son las 8 de la mañana, las calles comienzan a llenarse de luces cuando aún tienes un pie en el calor y otro en el frío.

Los días palidecen con ese filtro helado y un carrusel de tonos rojos por toda la ciudad. Papeles de regalos, señores vestidos de Papa Noel y castañas asadas, casi puedo sentir el aroma…Y así, sin darnos cuenta, ya es invierno…

Ahí está, en la esquina de siempre, con sus guantes rasgados y su larga chaqueta marrón.

– ¡Castañas, tenemos castañas!
– ¡Mariana, Mariana! Ya estás aquí, ¡ya es Navidad!
– Hola niño.

Lucas se paraba cada día a la salida del colegio para hablar con su amiga Mariana, esa señora con cara de pocos amigos a la que el niño avasallaba a preguntas mientras le compraba castañas.

Cuando llega a casa las suelta encima de la mesa, emocionado tras ver a su amiga.

– Lucas, ¿por qué compras más castañas?
– Papá, no me gustan las castañas.

Segundo premio

OPORTUNIDADES LABORALES
(Martina Pelta Rodríguez)

«Anuncio: se busca elfo para exhibición. Seguro y traslados no incluidos. Queremos elfos auténticos. Abténganse personas con orejas de mentira.»

Así son las ofertas de trabajo que nos llegan en esta época. Nada digno, no, pero como dicen muchos, no nos podemos quejar. Siendo elfo, este es el único trabajo en el que nos contratan, para el resto de empleos siempre prefieren humanos.

Dicen que son más altos, menos frágiles. Supongo que fuera del contexto navideño, espantaríamos a la clientela.

Suspiro con resignación, desempolvo el ridículo traje verde con mangas blancas y cascabeles, me echo perfume de canela, me calzo unos incómodos patucos (¡con lo que me gusta ir descalzo!) y me dirijo a la oficina más cercana.

Allí me arrancarán los apellidos de mis padres y me borrarán el nombre para sustituirlo por “Elfo 3: Plaza de la Constitución” o “Elfo 24: Mercadillo”. Me harán memorizar unas cuantas frases que canturrearé con voz aguda para que los niños humanos se rían.

Cuando acabe la temporada volveré al bosque borracho de olor a caramelo, monedas de chocolate tintineando en el bolsillo y contento, en el fondo, de que el contrato sea temporal. Así año tras año, Navidad tras Navidad.

Tercer premio

CUATRO LETRAS COMO CUATRO PATAS
(Alberto González Ramírez)

Este año me quedaré esperando junto a la chimenea. Este año también hará frío, y también lloverá, y saldré a la calle a pisar la escarcha, con un estruendo que despertará a todos los gorriones que anidan en los recovecos de los tejados.

Caminaré bajo las luces navideñas, que cada invierno alumbran las cálidas ventanas tras las que por estas fechas se reúnen niños alborozados, correteando por sus casas con los pelos alborotados y acaracolados. Ellos también esperan, junto a la puerta o a la chimenea, a que les visiten ciertos seres mágicos que habrán leído sus tiernas cartas y vendrán a complacer sus deseos infantiles.

Ellos, como yo, albergan una inconmensurable esperanza en su pecho, que se pone de manifiesto cada vez que llega la Navidad. Este año prometo que iré a verte. Conoceré el camino de vuelta, porque iré dejando un pequeño rastro, como Hansel en el bosque, pero de lágrimas en vez de miguitas de pan. Subiré al monte y me quedaré contemplando tus fotos junto a ti. Alzaré la cabeza y contemplaré la estrella desde donde me guardas.

Este año me quedaré esperando. Pero no vendrás.

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